Llevaba tiempo queriendo escribir algo sobre un tema de gran relevancia ética en la actualidad como es la diversidad sexual. Éste no será un artículo especialmente breve, pero creo que es una conversación que hay que tener hoy, cuando el budismo cuenta con más y más simpatizantes en nuestras sociedades. Constantemente vemos debates sobre la igualdad de derechos y matrimonio para parejas del mismo sexo, y a menudo los argumentos en contra proceden de las religiones.

¿Qué tiene que decir el budismo en todo esto? La mayoría de escuelas budistas actuales se muestran contrarias a la discriminación por orientación sexual. Por otro lado, el Dalai Lama dijo hace unos años que el sexo oral y anal no son aceptables según su tradición. En respuesta a las controversias que generaron sus declaraciones, el Dalai Lama puntualizó que no emitía juicios genéricos sobre lo que está bien o mal para toda la humanidad, sino sólo lo que es aceptable para los budistas. A mi parecer, esto no fue una gran mejora, ya que entonces son precisamente los homosexuales que siguen el budismo tibetano los que, en lugar de sentirse incluídos, confortados y aceptados por su religión, se quedan desamparados.
Pero ¿qué dicen los textos budistas? ¿Habló Buda del tema? La respuesta rápida a la segunda pregunta es «no», pero el tema no es tan sencillo. Hace unos meses escribí un ensayo sobre este tema para el máster que estoy estudiando. Me gustaría resumir aquí los puntos principales. Para empezar, para el budismo la orientación sexual no es un asunto moral, ya que la moralidad no tiene que ver con conformarse a unas normas reveladas por un ser supremo, sino con si los comportamientos generan sufrimiento (dukkha) o no. La postura más coherente con el budismo primigenio y con los valores de las tradiciones budistas en su totalidad se resume en estas declaraciones del maestro Hsing Yun, fundador de la escuela taiwanesa Fo Guang Shan:
A menudo la gente me pregunta qué pienso de la homosexualidad. Se preguntan, ¿está bien?, ¿está mal? La respuesta es que ni está bien ni está mal; es sólo algo que la gente hace. Si no se perjudican los unos a los otros, sus vidas privadas son asunto suyo; deberíamos ser tolerantes y no rechazarlos.
La conclusión de mi trabajo fue que la homosexualidad en sí no es problemática en términos budistas. Es por esto que el budismo no ha propagado una visión negativa de los homosexuales, nunca ha promovido su persecución activa y, cuando se ha establecido en culturas como la china o la japonesa, que los aceptaban y apreciaban, no ha reaccionado negativamente.
Tres cosas separan el budismo de las demás religiones respecto al tema de la homosexualidad. La primera es que el budismo no es pro-natalista. Y como no tiene ningún interés especial en que nos reproduzcamos, el sexo no-procreativo no es conflictivo. En segundo lugar, no existe un dios creador que determine cómo deben actuar los humanos y a quien haya que contentar. Y por último, el budismo es fuertemente monástico y ha tendido a poner mucho énfasis en el celibato y a desaconsejar el deseo sensual —de cualquier tipo. Así que, si los actos homosexuales son problemáticos, lo son exactamente en el mismo grado que los heterosexuales; ni más, ni menos. De hecho, es más fácil acusar al budismo de anti-sexual que de inclinar la balanza a favor de un tipo u otro de sexo.
Entremos en materia. El tercero de los 5 preceptos laicos es «evitar la mala conducta sexual». Las explicaciones no mencionan los actos homosexuales (aunque sacar conclusiones del silencio es delicado), sino sólo a las parejas femeninas que son inadecuadas para un hombre: básicamente las esposas de otros y aquellas mujeres que están aún bajo la protección de otra persona. Esto es totalmente androcéntrico y por lo tanto incompleto para nuestra realidad. Pero pensando en valores más que en normas podemos entender el precepto en términos de evitar comportamientos sexuales deshonestos, dañinos, manipulativos, etc. y todo esto es igual de aplicable a cualquier pareja o grupo de personas, del género que sean.
Por su lado, para los monjes y las monjas cualquier actividad sexual está prohibida. En el Vinaya, el código de conducta monástica, las ‘ofensas’ están ordenadas por gravedad: la más grave es sexo penetrativo con cualquier ser vivo y conlleva expulsión de la orden, mientras que otras como la masturbación mutua sólo requieren confesar lo sucedido. Lo interesante es que los actos homosexuales no constituyen una falta más grave que los heterosexuales sino que, dependiendo de los detalles de la situación, suelen considerarse o igual de graves ¡o incluso menos! Cuando el Vinaya condena esos actos, es únicamente por ser sexo, no por ser homosexuales.
Sin embargo no todo es tan arcoiris como parece. Según el Vinaya, hay dos categorías de personas a quienes se les niega la ordenación: ‘ubhatobyañjanaka’ y ‘pandaka’. La primera significa “que tiene las características de ambos sexos” y tiende a asociarse con hermafroditas y transgéneros, aunque en ocasiones también se refiere a homosexuales y bisexuales —el uso de los términos no es coherente a lo largo del canon pali. La segunda categoría tiene más connotaciones de comportamiento que no fisiológicas: ‘Pandaka’ se refiere a hombres homosexuales en el rol pasivo, afeminados y a menudo transvestidos. Sin embargo, en el mismo saco se engloban voyeurs, fetichistas e hombres impotentes. El término ‘pandaka‘ significa literalmente “sin pelotas” y designa a aquellos hombres que, por un motivo u otro, carecen de masculinidad —según la norma social de ese momento.
La costumbre de denegar ordenación a ubhatobyañjanakas y pandakas no se ha seguido a rajatabla en todos los países budistas, pero es ciertamente discriminatoria y recientemente ha ocasionado controversias en Tailandia. Como con todas las normas monásticas, existe una historia que explica el por qué se instauró. En este caso el Vinaya nos explica que un monje pandaka iba por ahí ofreciéndose sexualmente a otros monjes, novicios y laicos. Unos laicos accedieron a la oferta y esto causó mala reputación para la orden, así que el Buda decidió que a partir de ese momento no aceptarían pandakas y pidió la expulsión de los que ya estuvieran ordenados.
De este relato podemos deducir dos cosas. La primera es que no había un prejuicio previo contra los pandakas, puesto que existían pandakas ordenados como monjes. Y la segunda es que el motivo de la expulsión no eran las preferencias sexuales en sí de los pandakas sino una cierta promiscuidad irrefrenable y una tendencia al exhibicionismo que se concebían como intrínsecas a los pandakas. Esta historia y las descripciones de los comentaristas posteriores revelan que la categoría de pandaka corresponde más bien a lo que nuestra cultura popular llamaría ‘reinona’ o ‘loca’: homosexuales muy feminizados, histriónicos, chillones, que actúan y hablan con muchas referencias a lo sexual. Pero el Vinaya contempla la posibilidad de hombres ‘normativos’ penetrando o siendo penetrados por otros, o teniendo sexo con pandakas, sin que eso les convierta en pandakas. Por lo tanto, la discriminación contra los pandakas y los ubhatobyañjanakas no debería interpretarse como aplicable a todos los homosexuales tal y como hoy día entendemos esa condición. (La sexualidad es un fenómeno culturalmente condicionado, y las categorías de una épocas/culturas distantes a menudo no coinciden.) El problema con los pandakas es que, en tanto que estereotipo, se les cree poseedores de una libido exagerada que sería un obstáculo para la vida en comunidad y para su propio progreso espiritual.

En otras ocasiones el budismo primigenio parece completamente abierto con la diversidad sexual. El Vinaya dice que si un monje manifiesta atributos sexuales femeninos, ese monje simplemente pasa a seguir las normas de las monjas, y viceversa. La explicación es un tanto extraña, porque normalmente a uno no le aparecen atributos sexuales del otro género de la noche a la mañana, pero son varios los textos budistas antiguos que parecen explicar cuestiones psicológicas en términos fisiológicos. En mi trabajo consideré que estas instancias se referían a transvestidos o a transgéneros que querían vivir de acuerdo a su identidad sexual percibida. Y eso, según parece, era aceptado.
Sin embargo, pensadores de siglos posteriores como el influyente monje theravada Buddhaghosa no eran tan progresistas. En su comentario al Cakkavattisihanada Sutta, que habla del declive moral de la sociedad, Buddhaghosa interpreta que la expresión pali «miccha-dhammo» se refiere, entre otras cosas, a la homosexualidad. Pero la expresión es una forma muy genérica de decir ‘mala conducta’, así que su interpretación refleja sus propios prejuicios o los de su era y su cultura: no tiene fundamento alguno en los textos anteriores.
Por norma general, el budismo no se ha entrometido en la vida sexual de los seguidores laicos, ni siquiera en el matrimonio, que considera un asunto puramente civil, no religioso. Pero entonces ¿de dónde vienen esas declaraciones negativas del Dalai Lama acerca del sexo homosexual? La tradición tibetana es la excepción en este tema, y es el resultado de un proceso de ‘monasticisar’ la sexualidad laica. Ese proceso empieza en el siglo IV con el autor indio Vasubhandu, que incluye el sexo oral y anal en las enseñanzas laicas sobre mala conducta sexual, aunque sin mencionar la homosexualidad. La mención explícita llega en el Tíbet con Gampopa (1079-1153), que amplía aún más el ámbito de la ‘mala conducta’ y lista lugares y horas inapropiadas para el sexo, así como órganos y frecuencia —para vuestra información, un máximo de 5 orgasmos por noche. Entre las personas inadecuadas con las que tener sexo, siempre desde el punto de vista masculino, figuran otros hombres y pandakas. Unos siglos más tarde, Tsongkhapa añade la masturbación a la lista de actos sexuales inmorales.
El sexo ha quedado reducido a la procreación en una religión que, como ya se ha dicho, no es pro-natalista. ¿Cómo ha sucedido esto y por qué? Según académicos como José Cabezón, esos autores, siendo ellos monjes, empezaron a leer normas monásticas en términos de conducta laica, aplicando las categorías que ellos conocían del Vinaya, es decir, orificios, horas, lugares, personas, etc. Así, restricciones y sanciones ideadas en su inicio para monjes y monjas fueron siendo transferidas a la ética sexual laica. Pero los textos más antiguos no apoyan esas medidas y tienen muy poco a decir en cuanto a qué hacen los laicos con sus cuerpos. Y cuando tienen algo que decir, tiene que ver sólo con una visión negativa del sexo en general y no con el hecho de que se realice con alguien de un género u otro, usando tales o cuales órganos, etc.
De hecho, lo cuentos populares Jataka, que narran las vidas pasadas del Buda y sus discípulos principales, contienen varias escenas que sugieren sentimientos románticos entre hombres: historias de amistades especiales, intensas y devotas que en algunos casos incluyen compromisos de exclusividad. En China, una cultura cuya literatura amorosa entre hombres se remonta al siglo VI aC, el budismo no hizo ningún esfuerzo por frenar esas costumbres socialmente aceptadas. Y en Japón, que también aceptaba la homosexualidad antes de la llegada del budismo, incluso se desarrolló una peculiar tradición de amor masculino con chicos jóvenes (nanshoku) en círculos monásticos y samurais, a la que se llegó a dar justificación teológica.

Para ir terminando, en occidente el budismo se ha encontrado con una concepción distinta de la homosexualidad, donde toda persona con una preferencia exclusiva por personas de su mismo género es considerada homosexual y su orientación no se entiende como resultado de una mayor libido. Además, las personas homosexuales viven su condición de forma abierta y construyen el mismo tipo de instituciones que las personas hetersexuales: matrimonios y familias (o lo intentan). Por norma general, el budismo ha respondido muy bien. Hay algunas excepciones, como la Vía del Diamante de Lama Ole Nydahl, que ha llegado a promover una homofobia no agresiva dentro de su organización; pero son casos minoritarios. Algunas escuelas, como el vipassana de Goenka o el budismo Nichiren, se mostraban reticentes al principio pero han cambiado de actitud en pocas décadas —y para mí esto demuestra que el budismo tiene un sustrato doctrinal neutro respecto a la homosexualidad; ya que si no lo tuviera, sería difícil explicar ese cambio de opinión tan rápido.
Además, las migraciones de población del siglo pasado, especialmente las colonias japonesas en Estados Unidos, empezaron a involucrar a las instituciones budistas en bodas, y asociaciones como la Buddhist Churches of America fueron pioneras en realizar uniones homosexuales, antes de que estuvieran reconocidas por la ley. Emulando la misma función, la de dar cobijo a una opción que la legalidad aún no contempla, hoy las parejas gays o lesbianas japonesas pueden casarse en un templo de Kyoto. Taiwan también ha presenciado bodas homosexuales en templos budistas (primera foto del artículo).
Conclusiones
No hay motivos de peso en la filosofía y psicología budistas para condenar la inclinación emocional hacia personas de un mismo género, los actos sexuales entre hombres y entre mujeres, ni las personas transgénero o con identidad intersexual. Lo único que se critica es la actitud fuertemente lasciva y exhibicionista de un tipo concreto de personas. Aquellos y aquellas que coincidan con ese estereotipo pueden sentirse llamados a reflexionar en cómo su conducta sexual influye en su camino espiritual y vital, pero no son discriminados por sus preferencias en sí. Los textos que sí condenan los actos homosexuales son el resultado de transferir códigos monásticos al terreno laico y contrastan con los textos antiguos, que son mucho más sobrios y liberales. De todos modos, las éticas sexuales restrictivas tienen poca probabilidad de seguir siendo relevantes en un mundo donde la mayoría de practicantes son laicos sexualmente activos y liberados. Además, la tradición ha sido básicamente androcéntrica, así que no se trata la sexualidad de la mujer —y, como consecuencia, hay aún menos menciones al lesbianismo.
Lo que más abunda sobre la homosexualidad en la literatura budista es el silencio. No hay nada a favor en los textos, no hay un apoyo explícito. Pero la actitud de la gran mayoría de maestros y escuelas budistas contemporáneas nos insta a leer ese silencio en términos de aceptación y tolerancia. Podemos deducir que las actitudes hacia la homosexualidad de las distintas tradiciones budistas a lo largo de la historia, sean positivas o negativas, han tenido (y tienen) un origen más cultural que ‘teológico’, y que el budismo per se tiene una opinión neutra al respecto. O, dicho de otro modo, no tiene ninguna.
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Hola, interesante tu artículo pero no estoy de acuerdo con lo que dices de Lama Ole Nydhal cuando indicas que en Camino del Diamante se promueve una homofobia no agresiva dentro de la organización cuando lo común es ver a parejas homosexuales recibiendo la bendición hacia dicha unión por parte de Ole Nydhal.
Saludos.
Hola Rodrigo. Mis afirmaciones se basan principalmente en un artículo de Burkhard Scherer, es bastante detallado y los argumentos parecen coherentes; pero yo no tengo conocimiento de primera mano de esa escuela. Por supuesto que puede haber información sesgada o incompleta. A tu favor, el artículo explica que en los últimos tiempos Ole Nydahl ha suavizado su postura, incluyendo los casos que mencionas. Si quieres consultarlo está disponible aquí: https://www.religionandgender.org/articles/abstract/10.18352/rg.17/
gracias por tu comentario 🙂
He oído varias veces decir a Lama Ole que «no es importante con quién uno se va a la cama». Él recomienda una sana y abierta actitud hacia la sexualidad y usualmente da una bastante flexible interpretación del quinto consejo (no tener conductas sexuales dañinas) diciendo que «lo único que el Buda rechazaba era el incesto y otras formas similares de dañar a otros». Personalmente jamás escuché de él ninguna afirmación homofóbica. Una buena fuente sobre su opinión sobre la sexualidad y el amor puede hallarse en su libro El Buda y el Amor. Una entrevista sobre este libro puede verse en https://www.youtube.com/watch?v=SvCKof4zM8E
He leido con mucho interés este articulo, me parece muy ibteresanre, es más me ha reforzado en mi ateismo, hay que ver, si es que no hay ninguna religion que no sea homofoba, ni el budismo se salva!!
O sea, que no has entendido el artículo.
¿Que has entendido?…. poquito… poquito
Muy interesante. Eres un erudito! Saludos cordiales.
Interesante artículo, pero aún así que weba TODAS las religiones!! lo que no comprendo es porqué alguien que no encaja en los parámetros de alguna religión insiste en formar parte de la feligresía de las mismas religiones e iglesias que los repudian, pero bueno cada quien se autoflagela como mejor le apetece……….
Querido Omar, no siento que yo no encaje en el budismo a pesar de ser occidental, de este siglo, mujer y lesbiana…en cualquier caso siento que este budismo que nos llega muchos siglos después, desde oriente, a través de hombres, heterosexuales en su mayoría, no encaja conmigo. No tengo ninguna duda de que llevo la semilla de la budeidad en mi corazón, por encima de todo lo que puedan decir sobre mi como occidental, como persona del sXXI, como mujer y como lesbiana. No es que insista en ser budista, es que soy 100% budista desde que nací independientemente del ritmo que puedan llevar las instituciones.
Un abrazo
Uno de los problemas que genera confusión es el hecho de ver las enseñanzas como una norma que debe seguirse al pie de la letra sí o sí, y esto, para las personas que no tienen conocimiento o muy mínimo del budismo, crea malas interpretaciones, al pensar que las enseñanzas budistas se rigen de la misma manera que en otra religiones, cuando no es así. Recuerdo una anécdota de Marco Antonio Karam: en un seminario fue el traductor de Geshe Zopa; y una persona preguntó qué se pensaba del sexo en el budismo; el lama sonrió y dijo: «enjoy». Y explicaba que la sexualidad insana y que en el budismo no se acepta, es simplemente aquella que genera dolor para ti y para la otra persona.
Excelente artículo.
Interesante. Nomás una observación, creo que para referirse al deseo sexual es, libido, sin tilde. Con tilde tiene otro significado. Gracias.
Cierto, se me coló la tilde 🙂 ahora lo corrijo
Me ha gustado mucho el articulo. Gracias
interesante el articulo, creo que cada quien ejerce su sexualidad como la quiera ejercer, siempre respetando los gustos y tendencias de los demas, tolerancia para tener un mundo en donde todos podamos vivir en armonia. los muros son mentales y reprimirlos siguiendo reglas sociales o religiosas es frustante. saludos…
Se plantean las tendencias sexuales como una opción que corresponde a la libre elección de la persona y eso así debiera de ser si no fuese que externamente hay quienes están interesados en causar infertilidad y homosexualidad
en favor de la disminución del exceso de población del planeta. Nos atacan constantemente con nuevos contaminantes que causan anormalidad en las funciones hormonales de nuestro cuerpo y la Organización Mundial de la Salud
mira hacia otro lado consintiendo la degradación del planeta y de las gentes que lo habitan. Lo que en un momento determinado fue catalogado como enfermedad, fue más tarde rectificado en favor de intereses de colectivos con
poder que se muestran interesados en que ello a si se contemple. Vivimos en un mundo carente de principios con escasa moral en el que la verdad puede configurarse según le conviene al poderoso
ver http://causas-consecuencias.com/causas-de-la-homosexualidad/
Esta sección es para comentarios que tengan algo que ver con el artículo específicamente. Por favor no dejen mensajes no-relacionados y menos si son irrespetuosos y ofensivos hacia cualquier colectivo. Gracias.
No voy a alargarme en el tema porque no es el del blog, pero sí comentarlo por la tolerancia que el artículo explica: la homosexualidad no es una enfermedad. Y el ser humano sufre de superpoblación. Son dos hechos científicos. Lo que tú estás comentando tiene dos calificativos: conspiranoia y homofobia.
Que bueno es decir las cosas de manera sencilla y natural, sin censurar, sin etiquetar ni juzgar. Tocar el tema me parece no solo interesante sino importante. Esto nos aclara a todos. Seguimos avanzando, seguimos creciendo.
Si todas las manifestaciones sexuales fueran buenas,no existirian enfermedades sexuales;no se confundan.
Leonor,te encuentro toda la razon,todo esta sexualizado y se invierte mucho dinero en ello.el problema que tiene el budismo es que los invade una paz ficticia .meditan todo el dia.se purifican todo el dia.necesitamos gente activa,que se embarre,que sea fortacha,que las dificultades lo hagan crecer.hombres y mujeres valientes.integros,defensores principalmente de lo logrado.con sacrificio y honestidad.obrando en silencio.
Leonor, por favor, aporta algún dato real a tus discursos… parecen simples delirios propios de una enfermedad mental…espero que no sea así. Un saludo.
JAJAJAJAJAJA
¿De dónde ha salido esta ignorante?
No tienes razón en nada de lo que dices en absoluto. Te lo resumo así porque no me voy a molestar en debatir la cantidad de burradas que escribes.
Lo siento, es que el budismo me ha enseñado a ser sincero y reirme antes de enfadarme con los fanáticos.
Eso de sugerir que las enfermedades sexuales son provocadas por salirse de la heterosexualidad no tiene ningún rigor científico y sólo se justifica por la ignorancia.
Las relaciones sexuales consentidas recíprocamente no llevan a enfermedad intrínseca causada por agentes patógenos.
Oscar.asis,sera. Y el ocultismo acabara.los rehenes de la carne asi se que daran.por toda una eternidad.hostigados quedaran. son entes .
Entendi.entes ciegos de descendientes de lot.del universo oscuro.
Interesante tu observacion. Leonor.y lo peor de todo.que todo esta preanunciado en el zendavesta persa.
Tú y Oscar sois tal para cual.
la homosxualidad es una secuela que se cuela en la escuela.
Leonor-Oscar (sospecho que eres una misma persona, por la peculiaridad de poner puntos sin espacio después, y en sitios curiosos): el primer comentario, sencillamente, es falso desde el punto de vista médico; las ETS han existido siempre en cualquier comunidad humana sin necesidad de homosexuales. Que esto no te guste es otro tema, pero es una característica de la realidad, acéptala.
El budismo no es necesariamente pasivo. Tus comentarios sobre luchar y activismo me los apropio para combatir la aversión, la intolerancia y la ignorancia y comentarios como éste precisamente.
Secuela que se cuela en la escuela.la escuela hinduista.es cosa de ver los dibujos inscritos en alguno de sus templos.visto por inocentes niños.templos declarados patrimonios de la humanidad.la mayoria del oriente asiatico.con sus creencias.no ha permitido a esos niños conocer un mundo mas sano.niños que no son libres .niños sujetos y objetos comandados sin ninguna alternativa de discernir y elegir..la india no es un ejemplo de vida.todo lo contrario a la verdadera naturaleza humana.la india es el pais con mas deformaciones biologicas.pero ellos creen que son divinidades.el sistema de eleccion de los dalai lamas para su eleccion.tampoco es sano.el esoterismo y todo su mundo no es real.todo esto es propio e imaginado por hombres.la china con su regimen tampoco es un ejemplo de vida sana.tampoco son libres.yo protejo a los niños.a todos los niños del mundo.hay mucha gente buena en todo el mundo..he conocido gente buena de todas las etnias.y en la intimidad de la conversacion surge que no son ni se sienten libres.para mi la meditacion es tiempo perdido.sin embargo la contemplacion es gracia.soy artista.sin recursos.sin embargo lo que hago es resultado de una dedicada observacion.no tengo estudios.pero mis obras demuestran lo contrario.soy libre y no sigo ninguna moda. No soy oscar.es un vecino.y estabamos juntos al responder.yo escribia.no se nada de computacion.ocupo mis manos en cosas utiles y productivas.babilonia y computacion es lo mismo.ha hecho mas daño que cualquier cosa.el ser humano es importante para todo evento.por el bien de todos.muchas gracias.me desahogue.
Esta página no defiende en absoluto el esoterismo, el sistema de elección de los dalai lamas y estas cosas que comentas, creo que no te has tomado el tiempo de ver de qué trata esta página…!!
Por lo demás, no sé si estos comentarios eran usar tus manos «en cosas utiles y productivas» pero lo que ha quedado claro es que te has desahogado… Espero que ahora te sientas mejor.
Todo esta relacionado.no existe ni el trasado ni el destino.pero si la identidad propia.y cuando ha sido buena se defiende.cuando no ha dado frutos se cambia.no todas las culturas nos vienen a todos.los homosexuales sufren.se menosprecian a si mismos.no existen las vidas pasadas.yo y tu y ellos.somos unicos e irrepetibles.todos los libros con respecto a la sexualidad en el oriente.son escritos e ideados por hombres.aceptarlo todo y no cuestionar nada.no me parece sano.tener maestros instrutivos tampoco.pues pierdo mi identidad y dificilmente podria recuperarla.la mayoria anuncia.y los que denuncian lo hacen por malas vias.y otros se laban las manos.me gusta cuando un hombre enfrenta con valores las dificultades.dice si con seguridad y dice no con severidad por beneficios en comun.no por beneficio propio.no existen las regresiones.ni las vidas pasadas.lo que si existe es un basurero llamado subconciente que absorve toda la informacion que recibo de libros.peliculas.etc.que nuestros precarios conocimientos no pueden discernir.conozco el budismo mas de lo que crees. Perdon si te ofendi.
Bernat .soy leonor
no deseo pelear contigo
tu descendencia viene de jose y la egipcia.no recuerdo su nombre.que potente.tu vida.te atrae el oriente.me caiste simpatico.porque me respetaste y no me borraste.aunque no creo en el budismo ni en sus formas.siento estima por ti.bendiciones.
Si quieren saber de budismo lean a Nichiren. El leyo los 80 mil sutras del Buda Shakyamuni y promovio el budismo verdadero…nada que ver con tu articulo. Muy lejos de lo que dijo el buda. Abrazos
La inteligencia no es solo información sino también juicio para manejarla. Los criterios propios basados en el estudio son solo eso.
Soy Bisexual siento atracción por los dos sexo por igual aunque mucho no lo comprendan deliran y me describen a priori, me describen de una forma que ni siquiera lo soy, el tema de la homosexualidad ha sido objeto de estudio subjetivo, soy una persona interesada en temas de las religiones, como el Budismo, debo decir que también el judaísmo tienden a ser más tolerantes pero lo reducen a que no es bueno, ya que dicen que el sexo esta solo para procrear me parece una explicación simplista, al igual que esta mandan a vivir controladamente y no caer en promiscuidad ni lujuria, el sexo tiene distintas formas de verlos, un cristiano, budista o judio no puede decir como uno debe ejercer el sexo mucho menos hablar de procrear ya que una cosa es SEXO y otro es procrear, en el acto sexual se pueden dar distinta forma de placer de amor entre dos parejas placer y afecto mutuo, entre dos personas que se aman de verdad, por eso me intereso ahondar profundamente en esta cuestión, sobre todo la religión cristiana ha sido para mi muy sentimentalista no se puede pensar con esa gente que todo lo reduce a Dogmas y absolutos y no dejan dudas que es lo maa humilde.
me gusto tu artículo, perdón si me fui un poco del tema.
Decir que el budismo es neutro en cuanto a la orientación sexual… es mentir.
Puesto que el monje es el ideal budista (vida sin la cual uno no puede alcanzar la iluminación), está claro que estas prácticas (TODAS) están prohibidas en el camino monástico. Luego NO ES NEUTRO si tu intención es alcanzar la iluminación o progresar en ella. TODAS están prohibidas.
Que el budismo equipare la homosexualidad, la zoofilia, pedofilia, necrofilia, efebofilia, las relaciones heterosexuales… indica el alto valor moral de sus enseñanzas. Para las religiones orientales, y para el budismo en particular, todo lo que tenga que ver con lo sensual y el cuerpo es malo, TODO. La sexualidad es fruto del deseo y de la acción con deseo…. obstruyen la mente, generan karma, son sufrimiento, son apariencia…
El budismo ha tendido a ser negativo hacia la sexualidad, en especial las formas que ponen más énfasis en el monasticismo como el Theravada. Esto no lo niega el artículo. Pero dentro de esa sexualidad no condena más una orientación u otra y, cuando lo hizo, creo que el ensayo argumenta el por qué.
Las dos corrientes principales (MAHAYANA = Theravada e HIMAYANA (budismo tibetano, chan, zen, tierra pura…) PROPONEN AL MONJE COMO ÚNICA VÍA para alcanzar el nirvana (= iluminación, despertar el yo búdico, convertirse en un bodhittatva…). Y todos los monjes que quieran alcanzar la iluminación son célibes.
El hecho de que se vea a una monja budista presenciando una unión de dos personas del mismo sexo no significa que lo aprueben. Les daría igual que fuera con niños o con animales pues representa un camino que nunca llevaría al despertar del yo búdico, NUNCA LLEVARÍA A LA ILUMINACIÓN. Ni siquiera acumularía buen karma, en en sentido de que toda acción con deseo, y toda acción sexual no es de por sí deseable para alcanzar la iluninación. (Y estas relaciones no tienen nada que ver con el tantrismo).
Delante de la imagen del Buda solo buscan la influencia de Samyaksambuda o de un Buddha-dhatu pues tienen la cualidad de «desprender ¿energía? positiva» que les ayude en el camino al despertar.
A mi me parece una contradicción que delante del buda, con la monja presente, se inicie un camino que es diametralmente opuesto a lo que el budismo siempre ha enseñado.
En el anterior comentario he confundido Mahayana e Himayana.
Quería decir que ambas corrientes Himayana (= Theravada) y Mahayana Proponen al monje como único camino.
Quizás corremos mucho a afirmar cosas y no tenemos tan claros los fundamentos. Se llama Hinayana, con «n», no es totalmente equiparable al Theravada, y la afirmación no es cierta de todos modos ya que el Mahayana, y en especial su subdivisión el Vajrayana, cuentan con historias de laicos que alcanzan el despertar, proponen ese camino y hasta hay linajes enteros.
Yo sólo quiero apuntar que conozco un tulku de budismo tibetano que, no sólo acepta la homosexualidad, sino que va a oficiar una especie de ceremonia entre dos chicas lesbianas.
Creo que en el camino medio está la virtud. Depende de cómo se actúe no de quien actúe.
PARA EMPEZAR, EL BUDISMO NO ES UNA» RELIGION»; ES UNA FILOSOFIA HUMANISTA : TIENE COMO OBJETIVO LA ILUMINACION DEL INDIVIDUO. LA ENSENANZA DE QUE EL INDIVIDUO DEBE «DESPRENDERSE» DE TODO VINCULO SOCIAL, MATERIAL Y AUN «RELIGIOSO», ES MUY ATRACTIVO. PERO SI LA «CELULA» FAMILIAR DESAPARECE Y SOLO ME «ENFOCO» EN MI «ILUMINACION» Y EL SEXO ES NO «PROREPRODUCTIVO», LA HUMANIDAD ESTARIA AL BORDE DE LA «EXTINSION». ES ATRACTIVO PARA PERSONAS PASADOS LOS 60 O 70 ANOS.
Excelente artículo, felicidades por esta investigación.
Todo el mundo intenta convertir el budismo en algo que se adapte a lo que desearían que fuera. En realidad ocurre lo mismo con otras corrientes. En el caso del budismo la afirmación de que no es una religión carece de sentido real, el hecho de que no hable de un Díos no significa que niegue su existencia, del mismo modo, no condenar explícitamente la homosexualidad o no reconocerla abiertamente produce todo tipo de afirmaciones o conjeturas que no suponen una postura oficial acerca del asunto. Después de todo, una corriente filosófica cómo algunos califican al budismo, no debería contar con una autoridad moral sacerdotal o monacal que avale sus preceptos, los cuales acaban pareciendóse cada vez más a dogmas sugeridos en lugar de impuestos oficiosamente. El budismo es tratado como una religión en realidad pero se niega esta cualidad cuando se establece una definición formal, generalmente acomodada a los disidentes de corrientes como el cristianismo entre otras. Muchos grupos vinculados al ateísmo se refugian en el zen con el objeto de acceder a un tipo de espiritualidad lo suficientemente parca en sus preceptos como para permitirles una consideración, en realidad nada consistente, de ateísmo zen. Mientras grupos cristianos practican un zen cristiano a pesar de la muy probable incompatibiidad doctrinal. Cierta presión social sobre el budismo para que se pronuncie con mayor claridad sobre la homosexualidad está relacionada con la humana necesidad de concretar ideas y posturas en lugar de una vacilante ambiguedad que, no es necesariamente perjudicial, pero obliga a todo seguidor de esta corriente que no puede ser filosofía pero no desea ser religión, a reflexionar sobre el fenómeno de la homosexualidad por si mismo, en un diálogo intímo, y concluir personalmente si la considera moralmente aceptable o no. Pero, si se elige tal opción, conocer la postura pública del budismo acerca de este asunto no sería necesario.
No entiendo cómo nada de esto impide sacar una visión de qué encaja o no encaja con las ideas de las tradiciones budistas, que son diversas pero concretas. Puedo querer pensar por mí mismo el modelo de ciudad que creo que funcionaría; pero eso no invalida descripciones de cuál es el programa del partido X o Y para las próximas municipales…